Durante los meses de septiembre y octubre de 2021, se ha arreglado la antena de lectura de chips (PIT tags) de los peces que pasan por la rampa para peces del azud de Ascó (la Ribera d’Ebre), que se diseñó y construyó en el marco del proyecto Life MigratoEbre. Se había dañado durante los aguaceros del 2020. Desde primeros de noviembre ya vuelve a estar en funcionamiento.
A finales de invierno se prevé realizar una nueva campaña de marcado de peces con chips (PIT tags) agua abajo del azud de Ascó, con los compañeros/as del Parque Natural del Delta del Ebro, para acabar de evaluar la eficacia de la rampa para peces. Sin embargo, durante las obras hemos visto pasar un gran número de peces, de tamaños y especies diversas, como la anguila de la imagen adjunta.
La rampa para peces en el azud de Ascó se inauguró el 9 de marzo del año 2018. El azud tiene una longitud de 170 metros y unos 2 metros de altura, y sirve para captar agua para la refrigeración de las centrales nucleares Ascó 1 y Ascó 2. Anteriormente, como mínimo con caudales bajos y medios, el azud era un obstáculo insuperable para la mayoría de los peces. La rampa para peces, que ahora permite la conectividad ecológica en este punto, aparte de la bajada de kayaks y piraguas, tiene una profundidad mínima de 50 centímetros, una pendiente del 3,5 por ciento, una longitud total de 50 metros y una anchura de 10 metros. Lleva entre 4 y 8 metros cúbicos por segundo. Incluye una antena de lectura de chips (PIT tags), para detectar el paso de peces marcados. La obra de la rampa costó 93.000,00€.
